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Joven mujer sonriendo con collar, mirando a la cámara, sobre fondo natural.

Soy Laura

Soy persona como tú. Soy intrépida, curiosa, emprendedora, alegre, valiente, extrovertida y creativa. 

¿A qué me dedico?

Desde que tengo memoria me dediqué a cuidar a las personas. Cuando aun no tenía edad de trabajar iba de voluntaria a una residencia. Y cuando por fin pude entrar en el ámbito laboral, el mundo de la sanidad fue mi nuevo hogar. Allí crecí. Comencé a trabajar como Técnica en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE). La primera profesión que tuve y que amaré durante el resto de mi vida. Me aportó muchísimo. Lo cierto es que roté por todos los servicios del hospital. Era fan de urgencias. Yo era urgencia pura. Siempre activa, dispuesta y preparada para actuar. Y tanto me gustaba todo aquello, que también fui Técnica en Emergencias Sanitarias (TES). Otra profesión que me encantó. La vida en la calle, la salud en otro entorno. Aun no lo sabía pero todas las experiencias creaban puntos de vista distintos. También estudié Imagen para el Diagnóstico. Un paso más para convertirme después en Enfermera (siempre lo fui). Y aunque pasaron años antes de hacerlo, amaba y aprendía cada día más de mi trabajo cómo profesional sanitaria. Y cuando llegó el momento, hice y acabé la carrera.

Manos formando un corazón con el cielo azul y nubes, símbolo de amor.
Mujer observando el paisaje en el bosque, con mochila y mirando hacia arriba.

¿Y qué cambió?

Lo cierto es que cambiaron muchas cosas. Mi profesión, mi vida, mis roles, mi lugar de trabajo, mi ciudad...todo cambiaba y yo también. Todo se volvió más exigente, más formaciones, masters, horas de trabajo... No había tiempo para descansar. Bueno, yo decidía que no lo había. Y así, entre formaciones, cambios, períodos extensos de no descanso y no reconocer mi cuerpo, me perdí en el mundo de la enfermedad. Pero no la de mis pacientes, en la mía propia. La vida me regaló una de las experiencias más valiosas que hoy considero. Viví la otra cara de la moneda. No supe verlo hasta que casi fue demasiado tarde. Pero aun y así, el proceso fue un aprendizaje maravilloso.

¿Qué pasó?

Viví años sintiendo el estrés en mi cuerpo, los signos y síntomas que causaba la ansiedad, sin entender ninguno de ellos, bueno, mejor dicho sin hacerles caso. Porqué el cuerpo habla, pero la mente calla. Y yo quería poner silencio a todo lo que creía que entorpecía mi vida, para seguir con ella. Lo que no veía era que estaba tremendamente confundida. Mi cuerpo gritaba que necesitaba una pausa. Lo hizo durante años, pero yo lo ignoré, tanto que el último grito casi me cuesta la vida. Y quizá quieres saber que pasó... y yo estoy deseando contártelo, pero he decidido hacerlo de viva voz. Por si escuchar (literalmente) mi experiencia te sirve de ejemplo, igual que a mi me sirvió escuchar las de otras personas... más adelante encontrarás un apartado para registrarte a mi masterclass gratuita dónde también te cuento esa parte de mi historia. Siéntela para ti.

Joven mujer con ojos cerrados y camisa blanca, collar y césped.
Mujer haciendo forma de corazón con manos sobre cielo azul.

¿Cuál es mi propósito?

Gracias a todas y cada una de las experiencias que he vivido (profesionales y de vida) hoy, consciente y despierta, puedo ayudar a otras personas de una manera diferente. Sigo cuidando, pero con un punto de vista distinto. Desde otro lugar. Con un enfoque verdaderamente holístico y una mirada compasiva y de amor. Porqué entendí lo que eso signifi ca. Entendí que eso lo es todo. He recopilado todas y cada una de las herramientas que me funcionaron para volver a mi, para recuperarme y conocerme más y mejor. Con el fi n de poder mostrártelas a ti, si hoy las necesitas. Poner al servicio nuestra sabiduría signifi ca cumplir con nuestro dharma (propósito, sentido). Y hoy elijo hacerlo de esta forma. Mi deseo es ayudar a otras personas (profesionales sanitarios) a no perderse. Ayudarlas a reencontrarse con su verdad y acompañarlas durante el proceso. Para que puedan seguir haciendo lo que aman, y que tan necesario es, pero cuidando primero de ellas mismas.

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